Así es, una chispa de luz en la música. De los pocos grupos que tienen esa extraña cualidad de ponerme de buenas, de gritar feliz, de querer bailar, cantar, gozar. Tengo aproximadamente 4 meses con estos españoles en mis listas de reproducción constantemente, y no parece que vaya a cambiar en el tiempo inmediato. Maldita sea la hora en la que no los conocí antes. Pero bueno, lo importante es que desde aquí desde mi Mexicali, disfruto a diario las joyitas que me han dejado estos tipos. En este momento, a altas horas de la madrugada, Saharabbey Road suena en las bocinas de mi computadora hacia toda mi casa, alegrandoles el sueño a mi familia. O al menos eso creo....
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