Hoy, hace unos cuantos minutos, me ganaron los recuerdos. Y me ganó la tristeza, al recordar la felicidad que lograste imprimirle a mi vida. Recordé las vivencias de hace un año, esa etapa maravillosa, donde los "te amo", los abrazos, el cariño. tus miradas penetrantes y bellas postradas en mi, las 2 fotos editadas donde me demostrabas tanto amor, tus besos y caricias recurrentes eran mi pan de cada día.
Al fin, por primera vez en mi vida, me sentí querido, amado, deseado e importante para alguien. Me sentí el hombre más afortunado del mundo. No tenías reparos en demostrarme tus sentimientos...
Y al recordar ésta etapa y compararla con los últimos meses de nuestra relación, donde sí, sabía la cantidad de cosas que traías en la cabeza, la verdad es inevitable añorar esos días.
M, había días en donde, al visitarte, o salir contigo, deseaba escuchar un "Te amo", deseaba tener un abrazo, deseaba un beso pequeño pero reconfortante; no pedía mucho, con una de esas cosas estaba satisfecho, deseaba volver a sentirme querido. Quizá no tenías cabeza para mi en esos momentos, pero a fin de cuentas el sentimiento seguía presente. Creo que no te costaba mucho el poder expresarme algo...
Había días que, quizá no lo notabas, pero también traía broncas y basura en la cabeza, me sentía mal y al escaparme contigo sólo deseaba eso... Nada más que eso... Me hacía falta... "Te amo, Oscar"...
Buenas noches.
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